Limpiar un termo no es una tarea fácil. Su forma hace que meter un estropajo y frotar bien todos los rincones sea casi imposible. Lo típico es llenarlo con agua y detergente, agitar un poco y escurrirlo… Pero te avisamos: así no queda totalmente limpio. Con el tiempo, los residuos se van acumulando, aparecen olores desagradables y hasta bacterias que pueden hacer que tu bebida no sepa bien.
En La Campera sabemos que un termo bien cuidado y limpio dura más,así que aquí te dejamos los métodos más efectivos para que lo mantengas impecable y listo para cualquier jornada.
Te dejamos 3 formas de limpiar tu termo por dentro para que puedas escoger el que te resulte más cómodo.
El bicarbonato y el vinagre son recursos muy usados cuando hablamos de limpieza gracias a sus propiedades desinfectantes y de neutralización de olores. Para limpiar el interior de tu termo con ello:
Y listo, solo te faltará esperar a que se seque bien para poder disfrutar de tu termo como si fuera nuevo.
Si tienes un cepillo alargado o una esponja para botellas, puedes limpiar tu termo de forma rápida y a fondo, asegurándote de que no quede suciedad en ningún rincón.
Debes asegurarte de que le das a todos los rincones de la misma manera para evitar que se concentre la suciedad en un punto específico de tu termo.
El arroz es un multiusos. Vale para todo, incluso para limpiar tu termo. ¿Cómo? Pues de la siguiente forma:
El arroz actúa golpeando las paredes interiores del termo, eliminando así cualquier resto de residuo.
Para evitar problemas y prevenir la aparición de sarro, lo ideal es que limpies tu termo después de cada uso. De esta forma, durará más y podrás disfrutar de la bebida que desees sin malos sabores.
Eliminar el sarro de tu termo es necesario para mantener el agua fresca y sin sabores extraños. Con el tiempo, estos depósitos minerales pueden acumular residuos y bacterias, afectando el sabor y dejando olores desagradables. Además, el sarro actúa como un aislante que reduce la capacidad térmica del termo, haciendo que la bebida se caliente antes. Para evitarlo, basta con una limpieza regular con bicarbonato, vinagre, un cepillo adecuado o arroz. Así, tu termo seguirá rindiendo al máximo, acompañándote en cualquier jornada sin perder eficacia.
Además de una buena limpieza, la clave para evitar el sarro es mantener tu termo seco. Una vez lavado, déjalo destapado y boca abajo hasta que no quede ni rastro de humedad. Si el agua de tu zona tiene mucha cal, usar un filtro puede ayudar a reducir la acumulación de minerales. Y, por último, evita dejar líquidos dentro durante demasiado tiempo. Vaciar, limpiar y secar después de cada uso es la mejor forma de asegurarte de que tu termo siga funcionando al máximo.
Si buscas un termo que puedas limpiar sin complicaciones, lo mejor es apostar por uno con interior no poroso, como los de polietileno estanco. Este material no absorbe olores ni sabores, evitando que tu agua acabe con ese regusto extraño que dejan otros termos con el tiempo. Además, los modelos con boca ancha facilitan aún más la limpieza, permitiendo un enjuague rápido y sin rincones inaccesibles.
En La Campera, diseñamos termos pensados para el uso diario, fáciles de mantener y resistentes a cualquier jornada. También contamos con Campera Sport, un modelo más pequeño y portable, elaborado con los mismos materiales aislantes. Olvídate de residuos acumulados y disfruta siempre de una bebida limpia y fresca. Consulta nuestro catálogo y elige el modelo que mejor se adapte a ti.
Vale, sabes que quieres adquirir uno de los Termos La Campera (quizá incluso una cantidad ingente que nos haga inmensamente ricos), pero quizá te ronda alguna duda por esa bonita cabeza. Pues para eso estamos también, ¡así que dispara sin miedo esas preguntas!
